miércoles, 30 de mayo de 2012

Hálito

Hoy quiero cantarle al dolor,
hasta que la vida me abandone
y el cielo se vuelva tierra.

Beber del pecado su hiel
y sufrir en un vago consuelo.
Hundirme en la propia miseria.

Arrancar el cuerpo del alma,
pagando así la redención
con la sangre de mis venas.



lunes, 28 de mayo de 2012

La duda

Veo en tus ojos el amor que por mí profesas y me pregunto si soy merecedora de tal afecto. Me intriga si te conservo porque te quiero con locura, o por un afán egoísta de que con tu presencia mediante, yo pueda cumplir mis sueños. ¿Qué es enamorarse? Antes tenía una idea de ello. Pero, tras conocerte, todos mis estrictos estándares y mis definiciones cuidadosamente calculadas de lo que debía ser cada sentimiento se desvanecieron.

Es extraño. Hay días en los que siento que se me va la vida si no estoy a tu lado. Sin embargo, en mis ataques de apatía parece que me da igual permanecer contigo toda una eternidad que morir sin volver a verte. Pero así y todo, me pongo a pensarlo profundamente y no puedo imaginarme un futuro que no sea en tu compañía.

Entonces, ¿por qué la duda?


domingo, 13 de mayo de 2012

Empezar de nuevo

Al final me decidí más rápido de lo que esperaba. Volví a abrir otro blog. Fue el primer nombre que se me vino a la mente y que fuera "no-tan-cutre" como la mayor parte de las cosas que se me ocurren. Porque palabras hiperbólicas hay unas solas y, por desgracia, me las han borrado. ¿Cómo sucedió? Pues, me había hecho una cuenta nueva de Gmail y decidí "pasarme" el blog de la cuenta vieja a la nueva. No tenía por qué borrarse, estaba todo perfecto. Al día siguiente, había desaparecido todo. Maldición. Gritos, casi llanto. A las horas, el blog regresa... Llego a copiar a duras penas algunas entradas "por las dudas", pero con la certeza de que nada le iba a suceder a mi querido tesoro si había reaparecido. Pero, ¡oh sorpresa! Al día siguiente, me volvió a aparecer que el blog estaba eliminado. Y no volvió a aparecer nunca más.

Crisis.

Todavía sigo en crisis por todo lo que he perdido. Pero supongo que debo tomarme esto como un nuevo comienzo, un cambio. Por mucho que me aterren. Pero... Maldición, todo lo que tenía allí... ¡BASTA! Joder, debo empezar a admitir que no va a volver y que si no cambio, voy a quedarme hundida en mi pozo de depresión. Pero cuesta, vaya que cuesta... Que ni siquiera puedo enhebrar las palabras para elaborar una oración decente. Recuerdo mi "presentación" del blog viejo, llena de optimismo y diversión. Y en esta, lo único que quiero hacer es mandar todo a la mierda.